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¿Cómo influye la alta cocina en la gastronomía común?

¿Cómo influye la alta cocina en la gastronomía común?

 

En términos gastronómicos, la alta cocina es a la alimentación lo que las grandes pasarelas al sector de la moda. Es sin duda el foco que marca las tendencias que tarde o temprano acaban llegando a nuestras propias casas. Aunque pueda sonar elitista, lo cierto es que los grandes cocineros a nivel mundial son los responsables de muchas de las mejoras de las que podemos disfrutar cada vez que nos sentamos en un restaurante, compramos un pequeño electrodoméstico o descubrimos un nuevo truco para esa receta que tanto nos gusta.

Hoy en el blog de Santa Teresa vamos a profundizar en este tema, para que conozcas de primera mano cómo influyen la innovación y la creatividad en la gastronomía, siempre sin dejar de comer sano y, por supuesto, de disfrutar. ¿Nos acompañas?

Viajar para descubrir nuevos sabores

Si hay algo fundamental para explorar nuevas opciones en la cocina, sin duda es viajar. Y no hablamos necesariamente de los tan fotografiados viajes a países exóticos, donde cualquier alimento parece sorprendernos. No, nos referimos tan solo a viajar y esto, puede ser a un pequeño pueblo de nuestra provincia o a una ciudad cercana.

En ninguna casa, restaurante o puesto callejero se cocina un plato de la misma manera. Si te fijas, los propios expertos hacen este tipo de investigaciones, porque la diferenciación gastronómica, muchas veces, se encuentra en los propios orígenes. Nuestro ejemplo es evidente, lo puedes comprobar, sin ir más lejos, en los gazpachos Santa Teresa, que ofrecen diferentes opciones a partir de la receta tradicional: con Tomate Raf, con Aliño tres estrellas, opción ligera…

Abre los ojos cada vez que comas fuera de casa, ya sea en esa escapada rural por Ávila o en un bistró de París. Gracias a este “síndrome del turista curioso” hoy se han asentado en España decenas de recetas con toques asiáticos (ramen, sushi, gyozas…), americanas (guacamole, arepas, pisco sour…) e incluso africanas y de Oriente Medio (peri-peri, cuscús, hummus…)

En resumen, se trata de dejar paso a la creatividad, también en la cocina. Alejarnos del miedo a intentar cocinar y probar cosas diferentes, abrirnos a nuevos sabores que nos proporcionarán una experiencia única. 

La innovación en ferias y restaurantes de alta cocina

Las ferias o certámenes gastronómicos son el foro perfecto para presentar nuevas técnicas culinarias. Términos como “cocina de fusión”, que ya es algo totalmente asentado, nacen de la globalización fruto de las ferias que han proliferado en los albores del nuevo milenio. Hablamos de algunas como Hostelco, Salón Gourmets, Madrid Fusión o el Forum Gastronómico, que atraen a profesionales de todo el mundo. Desde allí hemos ido conociendo productos como el pan bao, la sal del Himalaya, las algas wakame, nori y un largo etcétera de opciones, antes muy alejadas del público occidental no especializado.

En los restaurantes de alta cocina no solo disfrutamos de sus platos, sino de la esencia pura de ellos. Su propuesta abarca más que la receta en sí, se focaliza en su técnica, matices, combinaciones, procesos y puesta en escena. Para llegar a eso, es necesario recorrer todo un camino de documentación, investigación y pruebas que concluyan en un producto diferencial.

La cocina como laboratorio de pruebas

Por tanto, la importancia de la alta cocina no radica únicamente en lo exquisito o no que sea un plato, sino en las posibilidades que este nos brinde, tanto en su elaboración o propiedades, como en las aplicaciones para otras recetas. Hablamos pues de un enorme laboratorio de pruebas en el que, a través de un arduo trabajo de investigación, se alcanzan resultados que logran aplicarse a multitud de propuestas.

Si ir más lejos, tenemos el ejemplo de un producto muy conocido como es el vinagre balsámico. Este se obtuvo como fruto de la concentración del vinagre común, con el que se consiguió un sabor más dulce y concentrado. De este modo, un producto a priori intenso, se ha podido combinar con ingredientes más tenues sin desnaturalizar su gusto.

Y estos procesos de investigación son también muy importantes en Santa Teresa, donde contamos con un departamento de I+D+I desde el que, recuperando recetas tradicionales de nuestra cocina, conseguimos llevar al consumidor nuevas propuestas a través de la innovación en el envasado. Porque nuestra filosofía se resume en una sencilla fórmula: Tradición + Innovación = Excelencia.

Conoce aquí los platos preparados de Santa Teresa